Te ofrecemos en este área algunas oraciones que puedan servirte para tu reflexión del día a día. Envíanos aquello interesante para compartir.
Oraciones para descargar en formato pdf/power point.
- Oración al “Stabat Mater”
VERSION CLÁSICA LATINA Y CASTELLANA: Stabat Mater Dolorosa
- Oración hebrea para “El Encuentro”
REFLEXIONES Y TEXTOS SOBRE LA IV ESTACION: Reflexión Encuentro - Teléfonos de emergencia de la Biblia
ENVIADO POR ANGEL DE MIGUEL – PRIOR COFRADIA: Telefonos de emergencia en La Biblia - Con la Cruz a cuestas…
ENVIADO POR SILVIA NUÑEZ: Que cargue con su Cruz y que me siga - El Juicio a Jesús (Infantil): Juicio a Jesús
- La Pasión contada a los niños (Infantil)
CORTESIA PARROQUIA DE S. LORENZO (HUESCA): Pasión para los niños - Oraciones a la Santísima Trinidad: DiumTri DomTri SabTri
- Oraciones Festividad Corpus Christi: Dium Corp Sab Corp Dom Corp
- Domingo 18 de diciembre: Dium4advA16cas Dom4advA16cas Sa23adv4A16cas
ORACIÓN DE PORTADORES
No me mueve, mi Dios, para quererte
el cielo que me tienes prometido,
ni me mueve el infierno tan temido
para dejar por eso de ofenderte.
Tú me mueves, Señor, muéveme el verte
clavado en una cruz y escarnecido,
muéveme ver tu cuerpo tan herido,
muévenme tus afrentas y tu muerte.
Muéveme, en fin, tu amor, y en tal manera,
que aunque no hubiera cielo, yo te amara,
y aunque no hubiera infierno, te temiera.
No me tienes que dar porque te quiera,
pues aunque lo que espero no esperara,
lo mismo que te quiero te quisiera.
La oración del Papa Francisco para el Jubileo de la Misericordia:
Señor Jesucristo, tú nos has enseñado a ser misericordiosos como el Padre del cielo, y nos has dicho que quien te ve, lo ve también a Él. Muéstranos tu rostro y obtendremos la salvación.
Tu mirada llena de amor liberó a Zaqueo y a Mateo de la esclavitud del dinero; a la adúltera y a la Magdalena de buscar la felicidad solamente en una creatura; hizo llorar a Pedro luego de la traición, y aseguró el Paraíso al ladrón arrepentido. Haz que cada uno de nosotros escuche como propia la palabra que dijiste a la samaritana: ¡Si conocieras el don de Dios!
Tú eres el rostro visible del Padre invisible, del Dios que manifiesta su omnipotencia sobre todo con el perdón y la misericordia: haz que, en el mundo, la Iglesia sea el rostro visible de Ti, su Señor, resucitado y glorioso.
Tú has querido que también tus ministros fueran revestidos de debilidad para que sientan sincera compasión por los que se encuentran en la ignorancia o en el error: haz que quien se acerque a uno de ellos se sienta esperado, amado y perdonado por Dios.
Manda tu Espíritu y conságranos a todos con su unción para que el Jubileo de la Misericordia sea un año de gracia del Señor y tu Iglesia pueda, con renovado entusiasmo, llevar la Buena Nueva a los pobres proclamar la libertad a los prisioneros y oprimidos y restituir la vista a los ciegos.
Te lo pedimos por intercesión de María, Madre de la Misericordia, a ti que vives y reinas con el Padre y el Espíritu Santo por los siglos de los siglos. Amén.