La obra, de 1941, es fruto del cincel del imaginero bilbaíno Quintín de Torre. Es propiedad del Excmo. Ayuntamiento de Logroño que en 1991 lo cede a nuestra Cofradía para su desfile procesional. Hasta 1994 fue transportado a ruedas.
Representa el momento en que un fatigado Jesús con la Cruz a cuestas se encuentra en plena Vía Dolorosa con la Virgen María y una de las Santas Mujeres, quizá Mª Magdalena, si bien esa identidad no se puede terminar de confirmar. El paso está incompleto pues en su diseño original se completaba con un romano que no llegó a tallarse.
La anatomía del Cristo está muy cuidada, presentando un rostro muy similar al de un judío que se aprecia sobre todo en la nariz aguileña. Agobiado bajo el peso del madero, carga la cruz sobre su espalda, asiéndola con el brazo derecho, mientras con el izquierdo hace mención de mantener el equilibrio. La mirada de Jesús se dirige hacia las otras dos imágenes, que se sitúan en un plano visual superior.
Completan la obra los relieves y mascarones dorados que adornan las andas del Paso procesional y los faroles de latón dorado y cristal rematados en su vértice por ángeles labrados. Actualmente se engalana el conjuntos con unos bellos faldones de terciopelo negro donde se abrazan los escudos de la Cofradía y de la Ciudad de Logroño.
El paso es escoltado por la Policía Local de la ciudad.
Por su concepción original, sus dimensiones y el número de imágenes resulta uno de los conjuntos más pesado para ser portado.
Procesiona durante la tarde de Viernes Santo.